Fotografia: Francesca Woodman
Saliste de la noche
y había flores en tus manos;
ahora surgirás de una confusa muchedumbre,
de un tumulto de rumores en torno a ti.
Yo que te vi entre las cosas primordiales,
me enfurecía al oír que te nombraban
en sitios ordinarios.
Hubiera querido que las olas frías inundaran mi espíritu
y el mundo se secara como una hoja muerta
o una vaina de amargón, y lo barrieran lejos,
para hallarte de nuevo
sola.
En Ezra Pound, Cantares y otros poema
Buenos Aires, CEAL, 1988T
Traducción: Gerardo Gambolini